LAS CINCO VILLAS

 

 

Hechizo Medieval en Tierras de Aragón. Puestos a hilar fino, no es la Geografía la que hermana a esta Comarca Aragonesa, llamada en tiempos la Extremadura Local por su condición Fronteriza y su abrupta Personalidad. A medida que uno se adentra en ella, percibe que el Paisaje le pasa como a la luz del día. Va mudando el humor de modo lento, pero insoslayable, desde las onduladas llanuras ribereñas del Ebro hasta las encabritadas serranías de Uncastillo y Sos del Rey Católico.

Las Cinco Villas tuvieron papel relevante en la Reconquista, las Cinco fueron desesperado objetivo de Almanzor, y las Cinco conservaron durante la Edad Media su valor estratégico, que les valio Privilegios Especiales. Así surgieron los memorables Conjuntos Arquitéctonicos que forman Sádaba y, sobre todo, Uncastillo y Sos. El paso de los Siglos ha respetado sus soberbios Edificios, y también el Hechizo Medieval que sigue presidiendo en Plazas, Porches y Callejas.
De dar la Bienvenida a las Cinco Villas se encarga la "Fidelisima Tauste", como reza su Escudo. Llanos de Cereales se extienden alrededor de una piña de Edificios presididos por la esbelta Torre Mudéjar de Santa María. Tauste se agarra a la piedra. Aún conserva sus Tradicionales Viviendas excavadas en la Roca. Merece una visita el Santuario de Sancho Abarca.

Carretera arriba aparece Ejea de los Caballeros, hoy Industrial Cabeza de Comarca. Aquí se inicia la Ruta del Románico, con las Iglesias de San Salvador y de Santa María. En esta última Iglesia, la de Santa María, se pierde el Sentido del Tiempo. Apenas entrado el Siglo XII, se celebraron aquí las Primeras Cortes de Aragón, Presididas por el Rey Alfonso I.
Sádaba surge luego sobre una pequeña elevación. A la derecha se ve la Mole del Castillo, cuyos desnudos Muros de Piedra se confunden a capricho del Sol con los vecinos Cultivos de Secano. Pero esta Fortaleza Cisterciense no empalidece otras maravillas menos austeras como la peripuesta Torre Tardo-Gótica de Santa María; la encantadora Iglesuela Románica de Puylampa, a modo de Faro en el Camino de Santiago.
Más al Norte, ya en plena Serranía las empedradas calles de Uncastillo nos llevan a un escalón más alto de la Monumentalidad. Aquí el Castillo domina un Pueblo que puede decirse Museo, de tanta Casa Hidalga, Rincón Antiguo, Pórtico, Portalón y Parteluz. Pero sobre todo, tanta Iglesia Románica.

Sos del Rey Católico, último tramo de la Ruta. El Sobrio Conjunto de la Villa, empinada y Monárquica, que aquí Nació el Rey Fernando el Católico, del cual Heredó Apellido y Prestigio, se alegra la Villa con multitud de Geranios en sus ventanas de Piedra Sillar. Su Abovedada Plaza Mayor, la escalinata Románica de San Esteban, la sombra del Palacio de Sada, cuna del Rey, y muchos más. No dejeis de visitar la Torre de la Muralla sobre la Puerta de la Reina. Allí en lo alto, uno puede imaginar que en el horizonte aún redoblan los Tambores del frustrado Almanzor.
Probar los manjares de la Zona, que son: Migas a la Pastora y Cordero Asado. Todo ello acompañado con Vino de Olite.

SOS DEL REY CATOLICO: LATITUD: N42º29.290' / LONGITUD: W001º12.121'
UNCASTILLO: LATITUD: N42º21.212' / LONGITUD: W001º07.121'
SADABA: LATITUD: N42º16.164' / LONGITUD: W001º16.165'
EJEA DE LOS CABALLEROS: LATITUD: N42º07.009' / LONGITUD: W001º08.034'
TAUSTE: LATITUD: N41º55.559' / LONGITUD: W001º15.152'