jueves, 30 de junio de 2016

RIBERA SACRA




Las sorpresas del cañón del Sil. Parece una herida sinuosa, el Río Sil baja grabado en roca por la Ribeira Sacra. Es el principal afluente del Miño, nacido en la frontera de León y corre por cañones escarpados hasta la provincia de Orense, dicho territorio parece congelado en la Edad Media.

Nos os podeis perder Monasterios monumentales que cuelgan de las gargantas del río, entre terrazas de viñedos, bosques de castaños y robles. Al fondo, las montañas nevadas donde el lobo siempre deja su huella (pese a quien le pese). En la Ribeira Sacra el agua reza cantando.

Entraremos por el pueblo de Os Peares, la puerta natural de la comarca, con sus casas viejas incrustadas en la montaña y en perfecta convivencia con las vides. Os Peares comunica con Monforte, la villa situada en la otra punta de la Ribeira Sacra. "Reza un dicho gallego, que el Sil lleva el agua y el Miño la fama"... De hecho, es su principal afluente. Si no fuese por las presas, los pantanos que salpican el cauce del Sil, sería muy fácil trasladarse en el tiempo varios siglos, pero eso ya lo hemos comentado.

A estas sierras aisladas, hendidas por el río, llegaron los primeros monjes durante el Siglo VI. Eran cristianos primitivos, del Reino de Gallaecia. Hasta que llegaron ellos sólo había recónditos castros donde Roma había dejado su lengua y sus costumbres, pero todavía grababan las piedras con ronseles, ruedas y trisqueles como los que hoy se pueden ver en Bretaña, Cornualles o Irlanda. Si visitáis la zona con atención aprendereis leyendas, por aquí se pasea la Santa Compaña, la comitiva de almas en pena que las noches de luna camina por los bosques, buscando almas de vivos a los que condenar a su misma penitencia. O sea, que mucho ¡OJO!...

En estas montañas tienen un problema con el tiempo. Parece que deja de existir. Aquí saltan los duendes que los paisanos llaman "Mouros", a tender trampas al viajero, también se aparecen las "Lavandeiras", extrañas meigas que viven bajo las aguas del Sil y os guardan fabulosos tesoros, si sabéis buscar. Aquí tenéis que venir a la Ribeira Sacra buscando historias y monasterios. visitar el pueblito de Pereiro de Aguiar en su parroquia de Gozos, en una carballeira que custodia al Río Sil. Divisareis un animal emblemático, el Aguila. el silencio sólo lo rompen sus gritos.

Llegamos a Castro Caldelas, fue cabecera de ricas tierras. Por aquí pasaba la Vía VII Braga-Astorga y Nogueira de Ramuín, allí encontraremos castros prerromanos y dólmenes. Una región de Druidas, llegaron como decíamos, los monjes en el Siglo VI. En la villa de Esgos fundaron el monasterio de San Pedro de Rocas, uno de los cenobios más antiguos que se conservan en Europa. Hoy, es monumento histórico-artístico, pero su mayor atractivo, su magia. Fue la Reina Teresa de Portugal la que bautizó la zona como Rivoira Sacrata.

Nos encontraremos con benedictinos, cistercienses y los de Cluny. Se asentaron en la soledad y cultivaron la vid, hoy este vino tiene su propia denominación de origen, que no debéis dejar de degustar. En busca del tiempo detenido, los caminos de la Ribeira Sacra se jalonan de cruceiros donde el creyente se podrá refugiar de meigas y trasnos.

Y qué decir de Monforte de Lemos, la población más importante del Sur de Lugo, está remonta su origen al Siglo XII, con los Condes de Lemos y su castillo que domina la ciudad

VISITAS INELUDIBLES

NOGUEIRA DE RAMUÍN, MONTEDERRAMO, ESGOS, OS PEARES, PARADA DE SIL, CASTRO CALDELAS Y XUNQUIERA DE ESPADAÑEDO...

OS PEARES: LATITUD: N42º27.139' / LONGITUD: W007º43.930'

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